¿Conoces a alguien que entrene HIIT? Estamos seguros que sí, ya que este tipo de entrenamiento se ha popularizado por ser un método eficaz para favorecer la pérdida de grasa corporal. El HIIT (por sus siglas en inglés: High Intensity Interval Training) compite directamente con la recomendación de realizar 40 minutos de ejercicio cardiovascular al día, porque se cree que tiene mejores resultados a nivel de composición corporal. Pero, ¿Qué tan cierto es esto?
Iniciemos por definir HIIT. El HIIT, es un tipo de entrenamiento de resistencia cardiorrespiratoria y fuerza- resistencia muscular que se caracteriza por alternar intervalos de ejercicio de alta intensidad con periodos de recuperación de moderada/leve intensidad y que tiene una duración máxima de 30 minutos. Estudios actuales han demostrado su utilidad para la pérdida de grasa, fortalecimiento del sistema cardiocirculatorio e incremento de la sensibilidad a la insulina (es decir que tu cuerpo va a poder aprovechar la glucosa de forma más eficiente).
Lo que sucede con este tipo de ejercicio es que las sesiones de intervalos llegan a ser tan intensas que, aún después de finalizar el entrenamiento, nuestro cuerpo sigue utilizando las reservas de grasa como fuente de energía, ya que el metabolismo se mantiene activo por aproximadamente 12 horas después de que terminaste el ejercicio.
Se ha comparado la pérdida de grasa corporal y de circunferencia de cintura en personas que realizan HIIT y ejercicio cardiovascular convencional. Los resultados muestran que las modificaciones son similares, por lo que ambos tipos de ejercicio son buenos para la pérdida de grasa. No obstante, el HIIT lo consigue con sesiones más cortas de tiempo, lo cual puede ser útil si tienes una agenda apretada.
Como puedes ver, ambos tipos de entrenamiento dan buenos resultado; sin embargo, debes considerar que el HIIT es apto para personas entrenadas. Si apenas estás implementando el ejercicio en tu vida o estás regresando de un largo periodo sin entrenamiento, quizá no tengas la fuerza y resistencia cardio-respiratoria necesarias para realizar correctamente el entrenamiento. Lo mejor es primero adaptarte al ejercicio y obtener un poco de fuerza y condición física, ya que el HIIT demanda más esfuerzo y dependiendo de los ejercicios que realices, vas a requerir distintas habilidades deportivas (coordinación, equilibrio, entre otras). Una vez que hayas progresado con estas habilidades, coméntalo con tu entrenador para que te ayude con una rutina que te brinde los mejores resultados y no te lesiones.
OJO: El HIIT no es apto para todas las personas, si presentas hipertensión, problemas del corazón o alguna otra enfermedad crónica debes realizarlo bajo supervisión médica.
Recuerda que el mejor ejercicio para ti es aquel que disfrutes, puedas realizar constantemente y que no te provoque lesiones.
Referencias:
Weston, K. S., Wisloff, U. and Coombes, J, S,. (2014). High-intensity interval training in patients with lifestyle-induced cardiometabolic disease: a systematic review and meta-analysis. Br J Sports Med; 0:1–9.
Heydari, M., Freund, J. and Boutcher, H. (2012). The Effect of High-Intensity Intermittent Exercise on Body Composition of Overweight Young Males. Journal of Obesity, 2012.